Cajamarca, en un abrir y cerrar de ojos

Me sacaron disparado de la oficina, como siempre a última hora mi Gerente (no creo que lea mi blog), me dió luz verde para viajar a Cajamarca este pasado fin de semana y así como una bala perdida pero esta vez con un objetivo, me enrumbé a la tierra de Atahualpa, de las lluvias esporádicas, de los enormes cerros verdes que parecen tocar el cielo gris y celeste a la vez.

Llegé como a las 5 de la madrugada, junto con dos compañeros de trabajo, la verdad que no pude dormir mucho durante el viaje y aprovecho para desde este humilde espacio agradecerle al chofer por tener visión de rayos X y por estar dopado para no quedarse dormido, ni se imaginan la neblina y las curvas que hay para llegar. Yo como a las 3 de la madrugada abrí la cortina y no veía nada, así como lo leen, nada de nada, horrible oye!, ni huevón me puse a rezar, pero al instante mi amigo imaginario me replicó: ahora si crees en Dios no?, para eso eres buenazo, pero diganle que vaya a misa ...

Felizmente llegamos sanos y salvos y defrente al hotel, para colmo cuando llego a mi hotel, mi supuesta reservación no existia.

Disculpe Ingeniero (allá a todos los llaman así, aunque yo lo sea, me sentí extraño cuando me llamaron así), no tenemos a nadie registrado con su nombre.
Y donde crees que voy a dormir?, le dije al recepcionista.

Tenemos una habitación doble pero esta sin limpiar, lo que pasa es que una cama esta destendida.
Y su personal de limpieza?, le dije... Ya que voy a hacer, dame esa, pero no te voy a pagar, por el mal servicio...

Así que despues de un acuerdo salomónico, me dispuse a dormir, después de todo no hace tanto frio en esta ciudad y me quede dormido como una piedra.

A la mañana siguiente, aproveche que hay red inalámbrica, eso sí, esta ciudad en eso esta muy avanzada, hay redes inalámbricas hasta en el hotel mas misio, debe ser por las mineras, supuse, en fin me puse a trabajar...

Photo by djletuz.

Después al centro comercial, El Quinde, este jueves inaguramos una tienda Falabella Express.

Y claro, después de una agotadora de jornada de trabajo, mínimo un par de tragos para despejar la mente. Nos fuimos a una discoteca llamada el Diablo, esta disco queda dentro un establecimiento que tiene restaurant y otro ambiente, donde había una boda, al principio con mi amigo nos parecia raro entrar a una disco con decoración misma boda.

Oye y estas velas blancas, bien alucinante la decoración
Si pués, parece que fuera de matrimonio
Ey!, este es un matrimonio, y la disco?

Estaba al costado, ingresamos, la música agradable, aunque parece que en Cajamarca, los éxitos de los 90, son los hits del momento...

Oye no hay reggaeton en esta disco, que milagro?
Si pués, parece que el dj se olvido su cd de Don Omar...

Nos equivocamos, o le trajeron el cd de reggaeton al dj, pero a partir de las 2, todos estaban en un perreo de los mil demonios y uno tomando campari...

Después de la resaca, nada como seguir trabajando y a empezar a acostumbrarme al clima y la idea de viajar con frecuencia...